Todo sobre la Apicectomía: 7 Contraindicaciones Graves

Todo sobre la Apicectomía: Un Procedimiento Clave en la Salud Dental

Cuando se trata de preservar un diente infectado en la boca, la endodoncia es a menudo el tratamiento elegido. Sin embargo, en ciertas ocasiones, este procedimiento no resulta suficiente, y se hace necesario optar por la apicectomía dental.

Los dentistas recurren a esta cirugía menor para evitar la extracción del diente infectado. En situaciones donde los tratamientos de conducto no han tenido éxito, esta técnica permite eliminar el tejido infectado, posibilitando así la conservación del diente.

La apicectomía, un término no tan familiar fuera del ámbito dental, representa una solución crucial para ciertos problemas dentales que van más allá de lo que un tratamiento convencional puede solucionar. Este artículo profundizará en qué consiste la apicectomía, cuándo es necesaria, cómo se realiza, y qué esperar después del procedimiento.

¿Qué es la Apicectomía?

En términos simples, la apicectomía es un procedimiento quirúrgico endodóntico que involucra la eliminación de la punta de la raíz de un diente y el tejido infectado circundante. Es distinto de otros tratamientos dentales por su naturaleza quirúrgica y se enfoca en casos donde las grandes áreas periapicales están infectadas. Esta intervención permite erradicar infecciones que continúan presentes después de un tratamiento de conducto.

Así, se alivian las molestias residuales de la endodoncia y se evitan complicaciones futuras. También se impide la necesidad de extraer el diente, permitiéndole seguir desempeñando sus funciones normales en la boca.

Casos en los que se recomienda la Apicectomía

La apicectomía es recomendada cuando hay problemas prolongados en un diente tratado con endodoncia, y el tratamiento no quirúrgico convencional no basta. Esto puede incluir casos de caries profundas, traumatismos, infecciones bacterianas, entre otros.

Proceso de la Apicectomía

El proceso de una apicectomía incluye la administración de anestesia local, seguido limpiar la infección del hueso, remover y eliminar, una pequeña parte del tejido infectado en la punta de la raíz del diente y luego sellar el extremo de la raíz con un relleno pequeño, para prevenir futuras infecciones.

Es necesario hacer una incisión en la encía sobre la raíz del diente o alrededor del borde gingival de varios dientes. Después, se levanta la encía para acceder al hueso. Se llega al área infectada retirando una cantidad pequeña de hueso sobre ella con un taladro. Todo tejido infectado se limpia cuidadosamente antes de extraer una parte de la punta de la raíz.

Posteriormente, se sella el extremo de la raíz con un empaste pequeño. La encía se sutura de nuevo en su lugar con puntos solubles que generalmente desaparecen en unas dos semanas. Sin embargo, el dentista o cirujano podría decidir retirarlos antes. Dependiendo de la intervención y la complejidad del caso, este tipo de tratamientos suelen durar entre 30 y 90 minutos. En algunos consultorios cuentan con microscopios quirúrgicos que permiten hacer un abordaje más preciso.

¿Qué tipo de anestesia se utiliza?

Habitualmente, la apicectomía se lleva a cabo bajo anestesia local, lo cual implica una inyección en la encía para adormecer la zona. Este tipo de anestesia previene la sensación de dolor durante el procedimiento. Si siente una ansiedad particular, su cirujano podría sugerirle algún tipo de sedación.

En casos donde la infección alrededor de la raíz es extensa o si existe un quiste grande alrededor de la raíz, o bien es necesario intervenir varios dientes, podría ser necesario recurrir a la anestesia general.

Recuperación y Cuidados Postoperatorios

Tras el procedimiento, el especialista podría recetar medicamentos y dar instrucciones específicas para el cuidado en casa, incluyendo técnicas de cepillado y restricciones dietéticas.

Una vez que el efecto de la anestesia local se disipe, unas horas después de la cirugía, es normal experimentar cierta molestia. Si se anticipa un dolor considerable, su cirujano le recomendará tomar analgésicos.

Además, podría ser necesario iniciar un tratamiento con antibióticos. Las molestias tienden a intensificarse durante los primeros días y pueden tardar hasta un par de semanas en desaparecer completamente. Es posible que necesite tomar uno o dos días de descanso en el trabajo, durante los cuales debe evitar ejercicios fuertes.

Tras la cirugía, puede experimentar dolor e hinchazón tanto dentro como fuera de la boca, que generalmente disminuyen en uno o dos días. Es crucial mantener la zona operada lo más limpia posible durante las primeras semanas postoperatorias. Si resulta complicado cepillarse, puede mantener la zona libre de residuos alimenticios enjugándose suavemente con un colutorio o con agua tibia salada (disuelva una cucharadita de sal de cocina en una taza de agua tibia), empezando al día siguiente de la operación.

Cuidados Orales Posterior a una Apicectomía

Aunque la mayoría de los pacientes retoman sus actividades normales días después de una apicectomía, es importante seguir ciertas recomendaciones para favorecer la recuperación:

● Optar por una dieta blanda y fría durante los primeros días.

● Aplicar compresas frías en la zona operada para reducir la inflamación.

● Limpiar la boca con suavidad, evitando cepillar directamente el área tratada.

● Utilizar enjuagues bucales o geles con clorhexidina desde el día siguiente a la cirugía, si el dentista lo indica.

● Mantener la cabeza en una posición elevada al descansar.

● Abstenerse de realizar actividades deportivas o ejercicios intensos.

● Evitar fumar y consumir alcohol.

Posibles Complicaciones

Las complicaciones después de una apicectomía dental suelen ser poco comunes. En su mayoría, es un procedimiento altamente exitoso que alivia los síntomas y las molestias asociadas a la infección dental.

Aunque las apicectomías son generalmente seguras, existen riesgos de complicaciones postoperatorias o daños en los nervios. Es crucial seguir las instrucciones del médico y estar atento a cualquier signo de infección o retraso en la curación.

De acuerdo con un estudio realizado en 2020, aproximadamente el 97 % de los pacientes sometidos a cirugías apicales reportaron resultados excelentes hasta cinco años después del procedimiento. Incluso más allá, en el rango de 10 a 13 años, los resultados positivos se mantenían en más del 75 % de los casos.

Es raro que ocurra sangrado postoperatorio, pero si sucede, suele controlarse aplicando presión sobre la zona con un pañuelo o un hisopo durante diez minutos. En caso de que el sangrado persista, contacte al especialista. Se recomienda evitar fumar tras la cirugía, ya que incrementa el riesgo de infección, especialmente en procedimientos quirúrgicos orales.

Puede haber entumecimiento temporal en la encía debido a la elevación de esta para acceder a la raíz del diente, desapareciendo usualmente en unos meses. Además, la encía puede retraerse ligeramente durante la cicatrización. Si el diente tiene corona, el borde de esta podría quedar expuesto.

Aunque raro, la infección puede reaparecer meses o años después, lo que podría requerir repetir la cirugía o, en algunos casos, extraer el diente. De acuerdo con reportes, generalmente la causa del fracaso o reincidencia de la infección suele estar relacionada a la presencia de un espacio en el final de la raíz y un sellado apical deficiente que favorece la persistencia y la proliferación de las bacterias.

Contraindicaciones para este procedimiento

Aunque existen situaciones en las que se recomienda la apicectomía, hay circunstancias en las que este procedimiento no es aconsejable. Algunos de los factores que contraindican su realización incluyen:

● Daño severo en la raíz del diente.

● Pacientes con trastornos de coagulación sanguínea.

● Infecciones agudas acompañadas de sangrado intenso.

● Dientes que presentan fracturas longitudinales.

● Infecciones ubicadas cerca del seno maxilar.

● Dientes con conductos anormales inaccesibles a tratamientos endodónticos.

● Enfermedad periodontal avanzada o significativa pérdida del hueso de soporte.

● Porque es importante el Especialista

● Elegir un endodoncista calificado y con experiencia es fundamental para el éxito del procedimiento. Los criterios para seleccionar un especialista deben incluir su historial, habilidades quirúrgicas y conocimiento en la materia.

Conclusión

En conclusión, la apicectomía dental es un procedimiento quirúrgico importante y eficaz para tratar infecciones persistentes en la raíz del diente que no pueden ser resueltas mediante tratamientos endodónticos convencionales. Aunque es un tratamiento seguro con una alta tasa de éxito, es crucial tener en cuenta las contraindicaciones y los cuidados postoperatorios para garantizar una recuperación óptima.

La higiene bucal cuidadosa, una dieta adecuada, y evitar ciertos hábitos como el tabaco y el alcohol son esenciales para una cicatrización adecuada y para prevenir complicaciones. Como siempre, es recomendable seguir las indicaciones específicas del odontólogo y acudir a las revisiones postoperatorias para asegurar la salud y la funcionalidad del diente tratado.